Los malhechores recurren cada vez más a los medios de comunicación social para crear la falsa percepción de que han logrado una intromisión electoral a gran escala.
Se espera un retraso en los resultados de las elecciones en muchos estados que están manejando cantidades sin precedentes de votos ausentes y enviados por correo.
La tan esperada demanda es el primer gran golpe de Washington contra los gigantes de la tecnología que muchos de la derecha y la izquierda coinciden en que son demasiado grandes y poderosos.