Es de la localidad santafesina de Esperanza. También ejerció ilegalmente la medicina en la provincia de Córdoba.

Una falsa médica de la ciudad de Esperanza (Santa Fe) recibió la prisión preventiva en las últimas horas, al estar imputada por “ejercicio ilegal de la medicina” y “estafa” no solo en esa localidad sino también en otras de las provincias de Córdoba y de Entre Ríos.

A Natalia Huri De Simeone (42) se la acusa de haber cubierto guardias en el servicio de emergencias BEM y en el hospital de Esperanza durante varias jornadas del mes septiembre, donde atendió al menos a treinta pacientes, realizó diagnósticos y hasta recetó medicación. Además, emitió factura tipo C para cobrar sus haberes y utilizó un sello con una matrícula perteneciente a una médica neuróloga.

Asimismo, desde la clínica San José, de Morteros, reconocieron que esta mujer se desempeñó como médica de guardia durante dos fines de semana.

En los tribunales de Santa Fe, la jueza penal Susana Luna, ordenó mediante una medida cautelar que Huri De Simeone permanezca alojada en un establecimiento carcelario hasta tanto la causa se resuelva.

“Estafados” en Morteros

Desde la clínica San José de Morteros manifestaron su indignación al sentirse engañados por esta mujer.

José Nayi, directivo del centro de salud, contó en declaraciones a Radio República que esta mujer estaba ejerciendo como médica en otro lugar y se ofreció para hacer guardias en Morteros: “A partir de esto la invito a que se llegue a nuestra institución y efectivamente hizo guardias en la clínica”, reconoció.

El médico y directivo explicó que desde un primer momento se le pidió a Huri De Simeone la constancia del título y el seguro de mala praxis, señalando luego: “En la primera guardia no trajo las constancias y adujo que se las había olvidado. En ese momento nos pidió disculpas, pero traía sellos y todos los implementos propios de cualquier médico”, dijo.

Nayi manifestó que los médicos de guardia que toman siempre están supervisados por la institución médica y que atienden sobre todo el servicio externo ya que el internado lo maneja el staff médico de la clínica: “En ese sentido, desde el punto de vista de la atención no percatamos nada raro, más allá de que fueron dos o tres fines de semana”, argumentó.

Luego, el directivo reconoció que le advirtieron a la mujer que si no nos traía la constancia del título y el seguro de mala praxis no la podían seguir contratando: “Se excusó de volver por problemas personales y pasado el tiempo nos enteramos por la prensa que presuntamente esta mujer no estaba habilitada”, precisó Nayi, quien aclaró que el directorio de la clínica se sintió “estafado”.

No es la primera vez

Huri De Simeone ya atravesó una causa judicial en su contra en junio de 2019, cuando el director del SAMCO de la localidad de La Pelada alertó sobre la actividad irregular que desempeñaba la mujer en ese entonces por lo que se inició una pesquisa judicial.

De Simeone fue apresada y puesta a disposición de la Justicia santafesina. Pero en ese entonces, quedó en libertad y logró evitar una condena tras acordar una probation (o suspensión de juicio a prueba).

El Consejo de Médicos pide mayor atención

Desde el Consejo de Médicos de la Provincia de Córdoba se mostraron preocupados por este tipo de situaciones que si bien no se dan todo el tiempo, tampoco son casos aislados.

El médico sanfrancisqueño Mario Vignolo, miembro de este órgano, pidió a los centros de salud, instituciones y municipios que al momento de tomar un médico consulten al Consejo para saber si el profesional está en regla.

“Estamos frente a un delito porque se usurpa un título y medican, que es lo más grave y la gente confía. Si hay sospechas hay que consultar al Consejo para saber si la matrícula es correcta, si está vigente y si ese médico no tiene sanciones”, advirtió.

Vignolo informó que los falsos médicos suelen usar matrículas de profesionales fallecidos o de aquellos que ya la dieron de baja. También aclaró que por este motivo, el Consejo de Médicos de la Provincia de Córdoba decidió en los últimos años rematricular a sus profesionales para detectar a quienes ejercen ilegalmente la medicina.

Cabe recordar el caso resonante del joven de 19 años, Ignacio Martín, que se hizo pasar por médico del COE en la ciudad de Río Cuarto y es investigado por la muerte de una mujer de 82 años y de un joven de 29, quienes habrían fallecido en el medio de su proceder.

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