El Aston Villa conquista Old Trafford en un final de locos. Primero Hause marcó el 0-1, luego cometió un penalti en el 90', el cual Bruno Fernandes mandó a las nubes.

Qué partido de locos el vivido en Old Trafford. Pero, sobre todo, qué actuación del Aston Villa. Sin sufrir a grandes rasgos en su visita a un poderoso Manchester United, se llevan tres puntos muy meritorios. Tanto De Gea como Emi Martínez evitaron los goles, que, eso sí, llegaron en los instantes finales. Solo fue uno, pero qué uno. Hause remató a falta de cinco minutos casi con la nuca un balón para firmar el 0-1.

Los Red Devils parecían sentenciados. Pero, poco después, el propio Hause casi llevó a su máxima el apodo de los "villanos". Cometió una mano que fue un penalti para un especialista como es Bruno Fernandes. Sin embargo, bajo la mirada de Cristiano Ronaldo (desaparecido hoy), mandó la pena máxima a las nubes. Por tanto, segundo batacazo del United en la misma semana, que ya venía de caer eliminado en los 1/16 de la Carabao Cup.


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